POR ROBERTO GUILLEN
Si hay alguien que se ha ocupado y pronunciado por constituir la figura de un Procurador Ambiental, es el abogado y activista Mariano Núñez, quien al advertir los apresurados cambios en el titubeante gabinete de Manuel González, ha declarado que la designación de Raúl Ricardo Pedraza, ex presidente del Colegio de Notarios de Nuevo León, no sólo significa un conflicto de interés, sino que, tal como el mismo poderoso periódico El Norte lo señala, carece de experiencia.
Definitivamente la creación de una Secretaría de Desarrollo Sustentable connota un triunfo de todas las organizaciones de la sociedad civil, que han pugnado por procurar el cuidado del medio ambiente, pero al observar que el gobierno de M.González designa a un neófito e improvisado en la materia, proyecta una falta de tacto y de respeto a todas aquellas figuras que han entregado su tiempo a las luchas por una cultura ambiental, tal como lo fueron en vida la señora Marqueda y el maestro Claudio Tapia. Como lo es el aguerrido Guillermo Martínez Berlanga, la misma Ximena Peredo, incluyendo a la bella Paz Flores, entre muchos otros ecologistas y activistas que se han sumado a esta loable lucha porque el aire no se nos pudra y menos los árboles y los pulmones.
Lamentablemente eso es lo que pasa entre los gobiernos elefantiásicos, dominados por intereses cupulares, donde todo se reduce al calamitoso costumbrismo del quítate tu para ponerme yo…
De tal manera que le recomendamos don Manuel González y a su flamante equipo de colaboradores que le echen un telefonazo al Arquitecto Benavidez y le soliciten ese programa donde un puñado de voces autorizadas en urbanismo y medio ambiente , disertan no sólo con un perfecto conocimiento de causa, sino con un sentido de Humanismo…tanto que nos hace falta en este tiempo de chapulines cínicos…
