MARIO ANTEO
El sentido común atribuía al estrés sólo algunas erupciones de piel, ahora es vasto el abanico de enfermedades provenientes de la alquimia mente/cuerpo. Creo en el origen psicosomático del asma, la colitis, la soriasis, la migraña e incluso algunos cánceres. Con el estrés los músculos se tensan, la respiración se acelera y entrecorta, se colapsa la digestión, la adrenalina y el cortisol inundan el torrente sanguíneo, y cuán lejos está la paz, la alegría, las ganas de perdonar, qué lejos el Tibet, la luz interior, el amor soñado en la playa soñada… y cuán cerca los pleitos, embotellamientos, baches, la estridencia, las prisas. Sí, una nueva cepa de estrés resistente a los súper-antibióticos nos está moliendo en el crisol de la ansiedad postmoderna. Es la fatal mutación de un terrorífico virus contra el cual parece impotente el Hare Krisna de Harrison y el Imagine de Lennon.